La industria pyme se desplomó un 11,9% en marzo y acumula cuatro meses en caída
Solo dos de los siete sectores analizados muestran crecimiento, mientras que el resto enfrenta serios retrocesos en su actividad.
La industria pyme en Argentina registró una caída anual del 11,9% en marzo y acumuló una disminución del 19,1% durante el primer trimestre de 2024, en comparación con el mismo período del año anterior, según datos proporcionados por la CAME.
Durante el último mes, se observó un retroceso del 3,4% en la comparación mensual desestacionalizada. Esta coyuntura refleja la gravedad de la situación del sector y la necesidad de tomar medidas urgentes para revertir esta tendencia.
Se trata del cuarto mes consecutivo que la actividad fabril retrocede y, por cómo vienen los pedidos de producción, las pymes no ven un piso en el corto plazo.
Los operadores de las pymes industriales reportaron estar operando al 70% de su capacidad instalada en promedio, con muchos enfrentando altos niveles de stock sin poder generar suficientes ventas para sustentar la producción. A su vez, esta situación se agrava con los costos crecientes y márgenes cada vez más reducidos que amenazan la viabilidad de muchas de estas empresas.
En tanto, las industrias consultadas por la CAME destacaron que los precios estuvieron más estables y un 25,3% señaló que siguen teniendo problemas para reponer stocks.
Qué indica el análisis sector por sector
En marzo, el sector de Alimentos y bebidas experimentó una disminución del 5,6% interanual a precios constantes, y del 3,6% en comparación con el mes anterior. En el primer trimestre del año, registró una caída acumulada del 14,2% interanual. Las industrias operaron al 73,3% de su capacidad instalada.
A pesar de este desempeño, algunas empresas consideraron positiva la desaceleración de los precios y la normalización en la importación de insumos. Sin embargo, el panorama futuro se caracteriza por costos en aumento, márgenes cada vez más reducidos y ventas en descenso.
En el sector de Textiles e indumentaria, se observó un crecimiento del 10,9% interanual en marzo, aunque se registró una caída del 0,5% respecto a febrero. En el primer trimestre del año, acumuló un aumento del 2,3%. Las industrias operaron al 71% de su capacidad instalada, un nivel bajo pero mejor que el año anterior.
A pesar del incremento en la actividad, las empresas expresaron su preocupación por el aumento en las tarifas de electricidad y la insuficiencia de las ventas para cubrir los costos de producción.
En el sector de Maderas y muebles se experimentó una contracción del 11,9% interanual a precios constantes, y del 4,4% en comparación con el mes anterior, ajustado por estacionalidad. En el primer trimestre del año, acumuló una disminución del 20,1%. Las industrias operaron al 72,6% de su capacidad instalada.
Aunque los precios se mantuvieron relativamente estables durante el mes, la producción se vio muy afectada, con escasas consultas y ventas bajas. Asimismo, la detención de obras por parte de la población y los gobiernos a todos los niveles tuvo un impacto negativo en los sectores directa o indirectamente relacionados.
En marzo, el sector de Metal, maquinaria y equipo, material de transporte experimentó una contracción del 16,8% interanual a precios constantes, y del 4,8% en comparación con el mes anterior. En el trimestre, acumuló una caída del 24,5% respecto al mismo período de 2023. Además, las industrias operaron al 66,6% de su capacidad instalada, niveles similares a los de los últimos meses.
Las empresas consultadas mostraron preocupación por las condiciones económicas, pero también se mostraron optimistas respecto a la recuperación. Mientras algunas han tenido que despedir personal debido a la falta de trabajo, otras optaron por cerrar algunos días para no seguir acumulando stocks.
En marzo, el sector de Químicos y plásticos experimentó una significativa contracción del 20,7% interanual a precios constantes, y del 4,4% en comparación con el mes anterior. En el trimestre, la producción acumula una caída del 28,7% frente al mismo período de 2023. Durante el tercer mes del año, las industrias operaron con el 65,6% de su capacidad instalada, con bajos niveles de inversiones.
Las empresas consultadas explicaron que sus clientes mantienen altos niveles de stocks, lo que ha frenado los pedidos de producción. Aquellas pymes que exportan han logrado compensar la caída en el mercado interno, pero la rentabilidad sigue siendo una ecuación difícil de equilibrar con los costos actuales.
Finalmente, en el sector de Papel e impresiones, la actividad se contrajo un 27,4% interanual a precios constantes, siendo nuevamente el sector con mayor retroceso. En términos mensuales, también se registró una retracción del 5%, y en el primer trimestre del año la actividad acumula una caída del 23,7% frente al mismo período del año pasado.
Las empresas operaron al 77,9% de su capacidad instalada, un nivel alto tanto en comparación histórica como en relación con otros sectores, pero que se explica por los bajos niveles de inversiones.