Incendios en Córdoba: hay 13 mil hectáreas arrasadas y continúan los esfuerzos para sofocar el fuego

Los bomberos lograron controlar los incendios en La Calera, aunque las llamas en Ambul siguen activas. Las autoridades alertan sobre la prolongada sequía y el riesgo de una crisis hídrica en la provincia.

En las últimas horas, la provincia de Córdoba ha sido gravemente afectada por incendios fuera de control. Las llamas ya han alcanzado áreas cercanas a la autopista entre Villa Carlos Paz y la ciudad de Córdoba, lo que ha obligado a realizar evacuaciones masivas y desplegar un operativo urgente de bomberos y aviones hidrantes.

Las autoridades han instado a extremar las precauciones en las zonas afectadas, con varios tramos de la autopista cerrados al tránsito. 

A pesar de los esfuerzos de los bomberos y el apoyo aéreo, las condiciones climáticas desfavorables, como la falta de lluvias y el aumento de las temperaturas, complican la situación. Se prevé que los incendios persistan durante los próximos días, con temperaturas de hasta 34 grados pronosticadas para la próxima semana.

La población local vive momentos de gran incertidumbre, con muchos evacuados observando desde los techos de sus casas mientras el fuego amenaza sus viviendas y propiedades. A pesar del intenso trabajo de los equipos de emergencia, la batalla contra las llamas aún está lejos de concluir.

Dos bomberos han sido hospitalizados, uno de ellos en terapia intensiva debido a quemaduras graves mientras combatía el fuego. Además, dos brigadistas han recibido atención médica en el Instituto del Quemado.

Las autoridades han comunicado que el incendio en La Calera, que puso en peligro varias viviendas del barrio La Cuesta, ha sido contenido, aunque el riesgo persiste en otras áreas como Ambul, donde el fuego sigue activo. La sequía que afecta a la región agrava la situación y ha encendido las alertas por una posible crisis hídrica.

El vocero de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Roberto Schreiner, detalló que el incendio en La Calera abarcó un perímetro de 20 kilómetros, poniendo en peligro a 500 viviendas. 

“Pasamos una jornada complicada, con temperaturas altas y fuertes vientos, lo que dificultó las tareas de los bomberos”, indicó Schreiner. Aunque el fuego ha sido controlado en esa zona, se mantiene una guardia de cenizas para prevenir rebrotes.

En Ambul, más de 150 bomberos y aviones del Plan Federal de Protección Civil están trabajando para controlar las llamas. “Se evacuaron tres viviendas por precaución, pero la situación está bajo control”, informó Schreiner. Otros focos, como el de Villa del Dique, también han sido controlados, aunque el panorama sigue siendo crítico en varias zonas serranas.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha pronosticado mejores condiciones en los próximos días, con una disminución del riesgo de incendios de nivel rojo (extremo) a naranja (muy alto). Sin embargo, la prolongada sequía y la falta de lluvias en los últimos meses complican la situación. Además del fuego, la provincia enfrenta la amenaza de una crisis hídrica.

Marcelo García, investigador del CONICET, advirtió sobre las repercusiones de la sequía en el suministro de agua. “El dique de Córdoba está por debajo de la media, y si la situación persiste, tendremos problemas serios con la disponibilidad de agua potable”, alertó. También destacó que el fenómeno de La Niña podría intensificar las condiciones de calor y sequía en los próximos meses, empeorando aún más el panorama.

Las autoridades locales piden a la población extremar precauciones para prevenir nuevos incendios y reportar cualquier columna de humo al 911.

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