Javier Milei cerró una empresa estatal del holding ferroviario
A partir del 1° de octubre, la estructura y personal de Decahf serán absorbidos por FASE, marcando el inicio de un plan de ajuste y reestructuración que anticipa la privatización del sistema ferroviario estatal bajo la dirección de Milei.
En medio del conflicto salarial con los pilotos y personal aeronavegante sobre el futuro de Aerolíneas Argentinas, el gobierno de Javier Milei ha iniciado la reorganización y racionalización del sector ferroviario con el cierre de una de las cinco empresas que conforman el holding estatal de trenes.
En el contexto de la emergencia ferroviaria, la administración decidió eliminar la empresa Desarrollo del Capital Humano Ferroviario (Decahf) y transferir sus funciones, personal y dependencias a Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado (FASE).
Actualmente, Decahf cuenta con 420 empleados y se encarga de la capacitación y asistencia técnica, la administración de documentación legal e histórica, y el pago de salarios de Belgrano Cargas y trenes de larga distancia.
Bajo su gestión está el Centro Nacional de Capacitación Ferroviaria (Cenacaf), creado en 1985 en cooperación con Japón, y el Museo Nacional Ferroviario Raúl Scalabrini Ortiz, fundado en 1971, que preserva valiosos bienes históricos.
Además, Decahf administra el Patrimonio Histórico Documental Ferroviario, que incluye más de 1.280.000 legajos de personal, historias clínicas, libros de sueldos y más de 131.700 archivos técnicos de infraestructuras ferroviarias.
La resolución 35/24, firmada por la Secretaría de Transporte a cargo de Franco Mogetta, ordena que, a partir del 1° de octubre, toda la estructura y personal de Decahf pasen a FASE, la empresa estatal responsable de coordinar políticas e inversiones en infraestructura y servicios de trenes de pasajeros y cargas.
El gobierno de Milei justificó esta medida afirmando que “resulta fundamental orientar el destino de los fondos públicos hacia el objetivo primordial de maximizar las inversiones y los recursos empleados para la prestación de un servicio ferroviario en condiciones de eficiencia y seguridad, que únicamente puede lograrse a través del rigorismo en la imputación presupuestaria que debe ser focalizada exclusivamente en la seguridad operativa”.
Además, consideró que en el marco de la emergencia pública ferroviaria “corresponde hacer en el plano institucional una revisión de la organización y funcionamiento de las distintas empresas del sector ferroviario con el objetivo de mejorar la eficacia y eficiencia, tanto en la toma de decisiones, como en la implementación de las políticas públicas”.
Durante la gestión de Alberto Fernández, Decahf asumió nuevas tareas, como el mantenimiento del Museo Ferroviario Nacional, la administración de talleres, la valorización de estaciones en el interior del país, y la operación del Tren Museo Itinerante y el servicio turístico Mercedes-Tomás Jofré. Sin embargo, bajo la nueva administración, Decahf ha experimentado recortes significativos.
De 1.232 empleados en noviembre del año pasado, el personal se redujo un 66%, quedando solo 420 agentes. Asimismo, los contratos de servicios disminuyeron un 95%, pasando de 579 a apenas 30 personas.
